29 de noviembre 2009. Sala Heineken
Poco a poco, sin prisa pero sin pausa, parece que finalmente vamos pudiendo disfrutar en directo en España de muchas de las figuras más importantes del hard rock melódico y del A.O.R. que nos hicieron engancharnos a este mundo en los ochenta. En este caso les tenemos que agradecer enormemente a nuestros amigos Vidal Ruiz e Indigo Balboa su iniciativa y valor para hacernos llegar la presencia sobre nuestros escenarios de una de las voces míticas del A.O.R. y que cualquier seguidor de este estilo debería reconocer sin pestañear, el señor Jimi Jamison que se hizo grande con los míticos Survivor, uno de los pilares del rock melódico junto a otros nombres como los de Toto, Journey, Foreigner o Boston. Por desgracia la fecha no era la más propicia, domingo, fin de mes, Barça-Madrid, aluvión de conciertos, en fin, que la afluencia de personal quedó algo por debajo de lo que al menos yo esperaba, juntándonos unas trescientas almas que, eso sí, disfrutamos y nos entregamos de principio a fin de la velada.
Pero Jimi no estaba sólo, y para abrir boca pudimos disfrutar de la actuación de dos de los nombres más prometedores del, desgraciadamente, cada vez más desolador panorama nacional dentro del A.O.R., los murcianos Indicco y los barceloneses Gurú.
Abrieron fuego los chicos de INDICCO, con el mencionado anteriormente Indigo Balboa (ex de Casablanca) al frente haciéndose cargo de las tareas tanto de maestro de ceremonias y presentador, como de vocalista de la banda, muy bien en ambas facetas. Acompañaron a Indigo en escena el ex guitarrista de 91 Suite Paco Cerezo, el bajista Antonio Muñoz, el teclista Johnny Cabello y el batería Lean Martínez, además de Saray Meló en un segundo plano al fondo del escenario apoyando en los coros. Todos ellos ejecutaron una actuación limpia, llena de melodía y precisión, pero algo carente de fuerza y movimiento en mi opinión, echando de menos más presencia del sonido de guitarra de Paco y un poco más de pegada en la base, dejando mucho protagonismo para las voces y los teclados.
Aprovecharon la ocasión para presentar en sociedad cinco de los temas que tienen preparados para lo que será su primer trabajo de estudio que esperan tener en la calle a principios del próximo 2010, fueron las tremendamente melódicas, rozando el west coast, “Feel No Shame”, “Crying” y “Leaving Me”, acompañadas por la balada “Crying” llena de sentimiento y en la que se nota la influencia de Mark Spiro con el que ha estado trabajando Indigo, y por la más hard rockera “Talking About You” que animó más el cotarro. Completaron su set con tres acertadas y bien ejecutadas versiones de clásicos del rock melódico como “Wings” de Tyketto, “Here I Go Again” de Whitesnake, y sorprendiendo sobre todo con una magnífica interpretación de “No Easy Way Out” de Robert Tepper que ya nos fue metiendo en harina con la saga Rocky. Un cierre fantástico para una correctísima actuación, bien acogida por el personal, pero como os decía algo falta de potencia, cuestión de tablas y rodaje supongo.
Después de un breve descanso, teníamos en escena la presencia de David Palau y de Pau Sastre, dos experimentados músicos profesionales que han colaborado con infinidad de músicos de todos los estilos en nuestro país (desde Bisbal hasta Jorge Salán), y que ahora están embarcados en un proyecto hard rockero melódico de lo más interesante bajo el nombre de GURU. Esto es lo que brevemente nos iban a presentar, en formato seudo acústico, con Palau mostrando su devoción por Steve Vai con su Ibanez, y con Sastre tirando de acústica, para poner ambos sus buenas voces alternando y compaginándose magníficamente, aunque como sucedió con Indicco, echando de menos mayor respaldo y fuerza, aunque en este caso era lo lógico.
Nos ofrecieron cuatro o cinco temas, alguno de los cuales como la final y animada “Salvation” ya habíamos escuchado en su demo, al igual que la intimista balada “Staring At Your Door”, en la que los juegos de voces de David, más rasgada a lo Rafa Martín y la de Pau más cercana a Bon Jovi, quedaron realmente bien. Como entremés y primera toma de contacto con Gurú no estuvo mal, pero creo que con la banda completa en eléctrico esta formación promete sensaciones muy fuertes, esperemos comprobarlo muy pronto.
Y como bien dijo Indigo, llegó el momento que todos estábamos esperando y por el cual sacrificamos parte de nuestro descanso dominical, como dirían aquellos. Con los acordes de la celebradísima “Burning Heart” aparecía en escena JIMI JAMISON para empezar a ofrecernos casi hora y media lujo musical que pudimos disfrutar a base de bien. Junto a Jamison en escena los músicos de Indicco al completo, junto al otro guitarrista de 91 Suite, Iván González, y a otro corista, José Víctor, que apoyó muy bien con su voz junto a Saray y al propio Indigo. Desde el principio todo sonó redondo, parecía mentira el nivel de acoplamiento y precisión con el que se desenvolvieron los músicos siendo esta la segunda vez que tocaban juntos tras su bolo la noche anterior en Barcelona, realmente notable la labor en las guitarras tanto de Iván como de Paco, algo que no nos sorprendió tanto a los que ya les conocíamos, y muy bien en cuanto a potencia y matices la voz de Jamison que se mantiene en muy buena forma.
Todo sonaba compacto, directo y limpio, como pudimos seguir comprobando con otra de las joyas de Survivor, “High On You” que resultó todo un regalo, para a continuación presentarnos el tema título del último trabajo de Jimi en solitario “Crossroads Moment” que no desentonó en absoluto. Llegó uno de los momentos curiosos y que seguramente la mayoría de los presentes creíamos que no viviríamos nunca, como fue el tener la oportunidad de escuchar en directo “I’m Always Here”, el tema cabecera de “Los Vigilantes De La Playa” y que se marcaron de lujo sonando perfecto, sobre todo por el apoyo de las segundas voces.
Dejando seguidamente el protagonismo total para Jamison y la emotividad absoluta con “The Search Is Over” que a más de uno le puso los pelos de punta. No menos emotiva resultó “Rebel Son” coreada a pulmón por el respetable, no sin antes dejarnos otra muestra de la calidad de su última entrega con la rockera “Friends We’ve Never Met” que dedicó a la audiencia. Se tranquilizó algo la cosa con “Cry Tough” recordando su segundo disco en solitario “Empires”, y con la intensa “Is This Love”, de nuevo con las voces destacando.
El final de fiesta fue realmente difícil de superar, con una poderosa “I Can’t Hold Back” que me encantó además de por ser una de mis favoritas de siempre, por la pasión y entrega con la que la descargaron Jimi y compañía, con mención especial para el solo de Iván. Una compañía que aumentó a continuación con la entrada en escena de David Palau y de Pau Sastre para marcarse todos juntos una cañera versión de “Eye Of The Tiger” que estiraron notablemente con una curiosa batalla de guitarras en la que David, Paco e Iván, mostraron sus habilidades con el público disfrutando y coreando.
Se despidieron definitivamente con una tremenda versión del clásico “Gimme All Your Loving” de ZZ Top que sonó realmente rockera y rotunda, sin perder un ápice de su rollo vacilón y fiestero con el que nos dejaron con ganas de más, a pesar de las horas que eran y de tener que madrugar al día siguiente. Por suerte parece que no tendremos que esperar demasiado para poder volver a disfrutar a de algo parecido de nuevo con este pedazo de músico, además acompañado por su compañero en Survivor Jim Peterik, ya estamos contando los días. Los que lo vimos en Heineken ya sabemos que nos podemos esperar y seguramente repetiremos todos, y los que no pudisteis asistir no os lo penséis la próxima vez, seguro que lo agradecéis.
Poco a poco, sin prisa pero sin pausa, parece que finalmente vamos pudiendo disfrutar en directo en España de muchas de las figuras más importantes del hard rock melódico y del A.O.R. que nos hicieron engancharnos a este mundo en los ochenta. En este caso les tenemos que agradecer enormemente a nuestros amigos Vidal Ruiz e Indigo Balboa su iniciativa y valor para hacernos llegar la presencia sobre nuestros escenarios de una de las voces míticas del A.O.R. y que cualquier seguidor de este estilo debería reconocer sin pestañear, el señor Jimi Jamison que se hizo grande con los míticos Survivor, uno de los pilares del rock melódico junto a otros nombres como los de Toto, Journey, Foreigner o Boston. Por desgracia la fecha no era la más propicia, domingo, fin de mes, Barça-Madrid, aluvión de conciertos, en fin, que la afluencia de personal quedó algo por debajo de lo que al menos yo esperaba, juntándonos unas trescientas almas que, eso sí, disfrutamos y nos entregamos de principio a fin de la velada.
Pero Jimi no estaba sólo, y para abrir boca pudimos disfrutar de la actuación de dos de los nombres más prometedores del, desgraciadamente, cada vez más desolador panorama nacional dentro del A.O.R., los murcianos Indicco y los barceloneses Gurú.
Mariano Palomo
Se iniciaba esta novena edición del Granito el viernes con un cartel que se abría con las actuaciones de tres de los ganadores del certamen de grupos noveles (que sigue siendo el alma y razón principal de la celebración del Festival), a las dos primeras no pudimos asistir por cuestiones de horarios y atascos, y por lo que nos cuentan empezaron a descargar los burgaleses
A continuación les tocaba el turno a los valencianos
Lo primero que me llamó la atención fue la puesta en escena inicial del grupo, comenzando de forma estática y acústica, creciendo espectacularmente en su intensidad y garra a lo largo y ancho de su show, con especial mención para la labor de su percusionista Miriam que le dio el toque especial y original al sonido más pesado y agresivo del grupo, creando entre todos unos ritmos tribales a lo Soulfly en los que me echaba un poco para atrás la voz gutural y oscura de su vocalista. Sin conocer ninguno de los temas que desplegaron en su actuación fueron capaces de convencernos con su calidad y energía, y creo que se ganaron con creces el aplauso y reconocimiento del respetable.
El quinteto apareció en escena con un importante despliegue de medios, telón con el logo del grupo al fondo, y pirotecnia inicial (con algún que otro fallito) incluidos, y sobre todo con unas tremendas ganas que creo que hicieron llegar en buena medida a sus numerosos fans, tanto locales ya que alguno de los miembros del grupo son de Villalba, como llegados de distintas partes de la geografía nacional. En lo que al repertorio se refiere, se centraron obviamente en su última entrega “30º Grados Norte” que desgranaron prácticamente en su totalidad, con algún guiño al pasado con la curiosa “Los Perros De Pavlov”, y dejándome en general algo frío en lo que al sonido de guitarras se refiere, ya que me habían sorprendido muy gratamente en su sonido del disco y en esta ocasión los encontré más lineales y no logré apreciar los buenísimos matices que nos ofrecen en estudio Juanjo Sancho y Javi Marsellá, seguramente por algún que otro problema técnico.
Por temas me quedo con la inicial “Océanos De Arena” con destacada participación en los coros de los hermanos Marsellá, Javi y Santi (bajo), con la incisiva “RDBB” en la que destacó la potencia del vocalista Alvaro Sánchez, con la épica y extensa “30º Grados Norte. La Latitud De Los Caballos”, y sobre todo con las dos versiones que se marcaron, una correcta y siempre divertida “Antisocial” de los franceses Trust vía Anthrax que nos puso a corear y a botar, para cerrar de forma magnífica con el himno “Resistiré” de Barón Rojo en la que el escenario se llenó de gente con organizadores, colaboradores y amigos de la banda coreando las estrofas del tema junto al resto del público asistente que se quedó con una buena impresión de la banda tras descargar magníficamente el tema. Un final que mejoró la impresión general que me dejó el grupo, de los que esperaba algo más en directo.
Para comenzar teníamos ante nosotros a los hard rockeros locales
Al final me quedé con ganas de más, esperemos poder verles próximamente con una actuación más completa, porque potencial y ganas creo que tienen de sobra.
Un grupo con bastante recorrido y muchas tablas como demostraron en su más que correcta aparición en el escenario del Granito. Lo suyo es heavy metal clásico, puro y duro, y eso es lo que nos ofrecieron en su hora descarga llena de riffs agudos y penetrantes, buenas melodías vocales, y mucha energía a la hora de enfrentarse a la audiencia. Centraron su actuación en temas de su último disco “Alma De Fuego”, cayendo el propio tema título, la coreada “Lo Llevo En La Sangre”, “Luchando Hasta El Final”, o la destacada “Icaro”, en la que la potencia del vocalista Jorge B. se dejó notar, además de apoyar con su guitarra a Angel, marcándose se ambos buenos momentos, junto la solidez del bajista Jorge A., y del ex batería de Tierra Santa Iñaki.
Buena actuación de esta banda, que sin descubrir nada nuevo, sí muestran la categoría y energía suficientes para seguir creciendo.
El sonido fue magnífico en todo momento, con un toque quizá algo más cañero de lo habitual, y con cada cosa en su sitio, sonando con precisión y limpieza, siendo muy complicado destacar algo sobre el resto, aunque me quedo como siempre con los tremendo coros que acompañan a la voz cada vez más poderosa de Ignacio Prieto que volvió a reafirmarse como uno de los mejores, si no el mejor, frontman de España. Pero claro, no mencionar la solidez y fuerza que aportan en la base rítmica Angel Arias y José Martos, y la técnica y feeling estratosféricos que saca Manolo Arias desde su guitarra, sería un error imperdonable. Pero sobre todo hay que quedarse con los temas, sonando siempre compactos y directos, desde el principio con la tremenda “Unidos”, pasando por “Generación Sin Miedo A Vivir”, “Nosotros Somos La Revolución” que sonó muy cañera con solo de batería de José Martos incluido, la divertida y reivindicativa “No Necesito A Nadie”, la enganchante “Sin Descanso Hasta El Amanecer”, o la más melódica “Una Nueva Oportunidad” que sonó con la misma intensidad.
Antes hubo un sentido y sincero recuerdo para Javier Gálvez, manager de la banda hasta que nos dejó hace unos meses, algo que se repitió a lo largo del festival por parte de otras bandas y de la propia organización, un bonito detalle que siempre es de agradecer. El final del concierto lo pusieron la caña de “Adicto A La Carretera” y la premonitoria “2040” con su “Adiooooós” como estribillo coreado y apropiado para poner el broche final a un tremendo concierto de hard rock con todas las letras, y en el que destriparon prácticamente en su totalidad su primer trabajo que será sucedido en breve por la segunda entrega de la banda. Esperamos ansiosos escuchar el nuevo material y que nos lo presenten tan bien como siempre en directo. A día de hoy el hard rock nacional tiene un nombre propio, Atlas.
Empezaron a caer estos clásicos como “ A Toda Esa Gente”, “Palabras De Libertad” que siempre me ha parecido de lo mejorcito que han hecho y que sonó muy bien, al igual que la entrañable “Córdoba”, sin olvidar por supuesto los guiños a los maestros Triana con “Abre La Puerta” y sobre todo con “El Lago” que resultó magnífica y entrañable, como lo fueron “Junto A Lucía”, o “Al Padre Santo De Roma”. Como podéis comprobar en esta ocasión no hubo mucho lugar para los temas lentos, con lo que el repertorio resultó de lo más animado y dinámico, completado por algunos clásicos imprescindibles como “Velocidad” cañera y afilada, en la que Manuel Martínez se mostró a buen nivel como en todo el show, bien respaldado en la segunda voz por Manuel Escudero que mostró una vez más su gran potencial que podremos comprobar más extensamente en el nuevo proyecto de Jero Ramiro.
Tampoco podían faltar “Neceisto Respirar” o “Favorita De Un Sultán” que siguen triunfando por muchos años y orquestas que pasen, y por supuesto la magnífica “Todo Tiene Su Fin” de los Módulos que ya han hecho suya hace tiempo y con la que cerraron por todo lo alto la mejor actuación que les recuerdo a Medina Azahara en años, a pesar de la versión de Las Grecas de “Te Estoy Amando Locamente” que a mi me sobró, y que no dejó de ser una anécdota dentro de una grandísima actuación.